martes, septiembre 04, 2007

Combinación

Tengo un enredo en mi cabeza bastante grande y no sé porque parte comenzar, una mezcla de sentimientos increíble, con una pizca de miedo a irme sin poder decir lo que debería decir, esta combinación en verdad me asusta, ya que en cierta forma nunca he aprovechado las oportunidades que se me han presentado para expresar lo que en verdad siento y no sé, si es por miedo a una mala respuesta o simplemente por ser una persona un poco tímida. Tengo que confesar, que hace algún tiempo atrás, se me fueron dos grandes amigos. Uno por estudio y el otro, o más bien la otra, por mi culpa… A los dos los extraño muchísimo y aunque con uno tengo más contacto que con la otra, aún así me arrepiento por no haber dicho un simple “Te quiero” cuando podía hacerlo… Y la otra parte, la que fue mi culpa, ya no hay nada más que hacer y siento que tengo todo lo que quiero decir en la garganta hecho un nudo… Pero por otra parte, sé que las separaciones nos desgarran el alma, pero estás son necesarias para crece espiritualmente.

¿Por qué cuando uno tiene a las personas a su lado, no las sabe aprovechar y cando se van ahí uno, se da cuenta que nunca dijo lo que sentía?

¿Hasta qué punto uno puede llegar con esto?

Y es ahora, cuando esta combinación me esta matando lentamente, y me arrepiento una y mil veces por lo que no hice.

15 Comments:

Anonymous Anónimo said...

Shalom
Se libre en estas Pascuas.

http://usuishikiryoho.blogspot.com/

6:42 p. m.  
Blogger www.poemasparamiamor.blogspot.com said...

Primeramente Macarena permiso para entrar en tu mundo, y luego decirte que cuando uno sabe que por propia culpa pierde a un ser querido hay q afrontar todo, dejar la timidez y por el amor que se siente blanquear las cosas, no importa el resultado lo que importa es que nuestro corazón quede tranquilo que todo lo intentó, luego será lo que deba ser y a lo mejor lo que debe ser es que hay una reconciliacion y ambas habran aprendido algo, a dejar de lado las confusiones y a perdonar y pedir perdon, dos cosas que a los humanos nos cuenta mucho. suerte y espero que todo termine bien

Un beso niña

anngiels

8:52 p. m.  
Anonymous Anónimo said...

creo q uno llega hasta el punto en que tiene q "volver en el tiempo" y buscar reencuentros y de alguna forma manifestar todo lo que quisiste a ese alguien q tuviste al lado y no le dijiste nada... tb tube q pasar por eso... y a ratos no me gusto.. pero cuando "pude lograrlo y encontrar y dcir todo lo q debí", fue un enorme peso de encima q no volvi a sentir...

saludos!

2:40 p. m.  
Anonymous Anónimo said...

no sabes lo que tienes hasta que lo pierdes lamentablemente nunca vuelve by juanes


desgraciadamente cierto, y no sabemos aprovecjar las oportunidades y mas de decir cosas y de tontos nos quedams callados


saludos

2:50 p. m.  
Blogger Luna Agua said...

Los amigos/as son ángeles... es posiblñe que vuelvan si los llamas....



abrazos

6:02 p. m.  
Anonymous Anónimo said...

Hola
Gracias
Te quiero
Corro
Busco pega
Te quiero de nuevo
aunque me vine a estudiar
me acuerdo de los que enseñaba
Tu amigo de siempre
Claudio, el que corre por Alcalá!

9:37 a. m.  
Anonymous Anónimo said...

Hola guapa!

La lontanza no existe, citando al amigo Flores...

Un abrazo de otoño desde Europa!

9:38 a. m.  
Anonymous Anónimo said...

piensa en lo bueno y atraerás lo bueno

amor

7:41 p. m.  
Blogger Chechu said...

asi es el ser humano no se da cuenta que tiene la felicidad y se pone a buscarla para perderla.

5:47 a. m.  
Anonymous Anónimo said...

Maquita es dificil a veces la vida..y es muy bella a la vez, quizás solo contemplamos una parte del cuadro y no estamos apreciando el total.
Encontré esto que tal vez te interese

ACEPTACIÓN

Cuando el corazón llora por lo que ha perdido, el Profundo sonríe por lo que ha encontrado. Dicho Sufí.

¿Nos ha dado pena esa pérdida?, ¿ha finalizado la relación con una persona amada?, ¿ha desparecido alguna cosa muy simbólica?, ¿últimamente la vida pasa monótona, sin todavía vivenciar eso que uno anhela?, ¿acaso la salud nos ha dado un “aviso”? ¿tal vez la economía flaquea?, ¿acaso han herido nuestro ego?, ¿o bien es la rabia y la impotencia acompañadas de oscuros deseos de venganza?

Si miramos hacia atrás en nuestra vida y observamos la de aquellos que nos rodean, sabremos muy bien que ésta es un rosario en el que las risas se alternan con las lágrimas. Uno también intuye que toda experiencia por dolorosa que sea, trae envuelta enseñanzas insospechadas. La evolución como rueda de molino, refina y sutiliza a las personas y a las cosas. ¿Por qué nos duele tanto la pérdida? La respuesta señala a nuestro yo que se confunde e identifica con eso que se va, generando una sensación que nos fragmenta. En realidad, somos mucho más que nuestras partes. Nuestra existencia tiene otro alcance y la capacidad de crecer internamente es ilimitada.

Todos sabemos que cuando uno sufre, de poco sirve decirle que hasta la pérdida más dolorosa es una vivencia que madura el alma. Sin embargo, cuando uno recuerda que puede observar su dolor y comprender que éste es pasajero porque se trata tan sólo de la otra cara de la moneda, la tensión afloja y asoma un rayo de esperanza. Uno sabe que si acepta lo que duele, si acepta que el dolor forme parte del gran juego, sucederá que la tormenta se apacigua y uno se libera. Cuando sufrimos un desgarro por la pérdida nos tornamos más sensibles al tiempo que disolvemos formas ilusorias. Más tarde, sentimos el corazón expandido y miramos la vida con otras gafas.

¿Acaso alguien todavía duda que tras la noche oscura no tarda en llegar el alba?
¿Sabemos ya que tras el llanto de la pérdida, se oye la suave alegría de las nuevas llegadas?

El dolor es transitorio, siempre pasó de largo dejándonos el pecho sin corazas. En realidad, el dolor es un “cohete” hacia el Espíritu que abre nuestra sensibilidad y revela el sentido último de la existencia. El dolor prepara silencioso el estallido del amor escondido que uno guarda.

Si hay dolor, aceptémoslo y recordemos que no hay errores, ni castigos, ni siquiera culpas, tan sólo aprendizajes y crecimientos del alma. En el fondo, y mientras su influencia pasa, uno resiste afirmado en sus valores, y desde ahí, siempre gana. No hay culpables, tan sólo conductas y programas. No pensemos que el Universo es un lugar diseñado para sufrir en nombre de las pérdidas. Tenemos derecho a ser felices y, si el dolor llama a la puerta y ocupa temporalmente la morada, tengamos en cuenta que la Vida florecerá exquisita en lo más hondo de nuestra esencia.

Tal vez en plena confusión, uno no se da cuenta de lo que realmente pasa. Sin embargo, sabemos muy dentro, que tras la película dolorosa viene algo maravilloso que sentimos merecer por el simple hecho de darnos cuenta. Se trata de un milagro que se acerca veloz a nuestras vidas pero, ahora, de forma diferente y renovada. No se trata de “más de lo mismo” y, sin embargo, es justo aquello que nuestro Ser Interno, aunque no lo creamos, anhela y demanda. Confiemos. Dejémonos fluir y resbalar por las cascadas de la vida cotidiana. En realidad, mientras aceptamos, sabemos que ya llegan goces más profundos que abrazan nuestro pecho y hacen vibrar a nuestra alma.
Cariños
Diana

1:32 p. m.  
Blogger Maria Ines said...

Las ausencias son siempre más importantes que las presencias...
Desde que el mundo es mundo es así...
Lo esencial es darse cuenta...
Esta lección jamás la olvidarás...
Y es muy bueno crecer, madurar y convertirnos en mejores personas...
Un gran beso

4:00 p. m.  
Anonymous Anónimo said...

Estás casi en la disyuntiva de The Clash..."Should I Stay or Should I Go?". Muchas veces pasamos por el lamento de no saber aprovechar las oportunidades o, como es en mi caso, con el agravante de no saber verlas (a causa de la timidez).

Es tan simple...nunca sabemos lo que tenemos hasta que lo perdemos. Y esa lección nos llega más de una vez. Saludos cordiales y trata de que las heridas sanen.

5:00 p. m.  
Blogger Humberto said...

Al leerte, me laía a mi hace algún tiempo.
No dejaré consejo, pues no me gusta darlos. Y de tener alguno, creo aún no sabría cuál es.

Besos sin tiempo

6:09 p. m.  
Anonymous Anónimo said...

A veces dan ganas de retroceder la página y comenzar de nuevo, pero es imposible, así que no queda más remedio que asimilar los errores u omisiones y continuar, evitando repetir lo equivocado.

Debe ser que los errores salen precisamente para mejorar :)

Un abrazo Macarena

12:46 p. m.  
Blogger yo said...

Por dios niña, ni que me hubiese muerto.
Te cuento (para que veas que no se olvida de las personas que uno estima) estoy trabajando como yegua, literalmente hablando, trabajo, estudio, estudio, trabajo, trabajoestudio, estudiotrabajo (permutaciones), jajaja.
Debido a mis estudios que estoy realizando me he dado cuenta que ¡era mala como profe!! horriiiibleeeeee con letras grandotas, he criticado todo lo que hacia, actividades, evaluaciones, enseñanza, en fin todo, todo. Pero también me he dado cuenta, tanto por el estudio como por mi trabajo, que lo más importante es establecer una buena relación con los alumnos, a lo mejor peque al tratarlos como mis perjenios, casi hermanos, pero pucha que me hicieron reir a veces. Agradesco la confianza que tenian algunos en mi; así que creo que eso no estuvo mal.
mmm... pienso seguir estudiando, ahora se viene el doctorado, la verdad no sé si en chile o en el extranjero, todavía no lo sé.
Haciendo referencia a tu texto, es verdad, a veces cuando estamos con las personas no le decimos te quiero, ni a la familia, ni a los amigos, y a veces uno dice por qué no se lo dije, extraños remordimientos de los seres humano ¿no?. La cosa es rescatar cosas de las experiencias, y ahora que te diste cuenta de esto, dile a tú madre, abuelita, hermano, amigos, perro, gato..... en fin a los que quieras, que los quieres.
Fuiste muy buena alumna, loca (que entre los demás no se notaba). Se extraña que me digan profe.

12:12 p. m.  

Publicar un comentario

<< Home